Bicicletas eléctricas

11 tipos de personas a las que les vendría (muy) bien una e-bike

!function(f,b,e,v,n,t,s) {if(f.fbq)return;n=f.fbq=function(){n.callMethod? n.callMethod.apply(n,arguments):n.queue.push(arguments)}; if(!f._fbq)f._fbq=n;n.push=n;n.loaded=!0;n.version='2.0'; n.queue=[];t=b.createElement(e);t.async=!0; t.src=v;s=b.getElementsByTagName(e)[0]; s.parentNode.insertBefore(t,s)}(window, document,'script', 'https://connect.facebook.net/en_US/fbevents.js'); fbq('init', '451272222309090'); fbq('track', 'PageView'); Están llamadas a poblar nuestras calles, como ya lo hacen en buena parte de los países europeos: te contamos por qué las e-bikes están conquistando a un número cada vez mayor de ciudadanos.

Hay quien, a estas alturas, todavía mira con cierto recelo a las bicicletas de pedaleo asistido. Quizá por purismo, porque prefieren el esfuerzo que requiere una bicicleta convencional o, simplemente, porque no las han probado. Pero lo que nadie pone en duda es que existe un determinado tipo de ciclista (o potencial ciclista) para el que una bicicleta eléctrica es la solución de movilidad urbana perfecta. Estos son once de esos perfiles.

1. Quien quiere llegar más lejos.

Una bicicleta eléctrica tiene una autonomía que ronda los 70-80 kilómetros. Una distancia más que suficiente para disfrutar de ella durante largas distancias y periodos de tiempo sin necesidad de pensar en recargarla. Por eso, aquellos que quieren llegar más lejos lo tienen claro: nada como una e-bike.

Aquellos que quieran llegar antes, y más lejos, deben probar una e-bike

2. Quien quiere llegar antes.

Un trayecto en bicicleta puede reducirse a más de la mitad de tiempo si cuentas con la inestimable ayuda del pedaleo asistido. Todo aquel que ha probado una e-bike sabe que moverse con ella por la ciudad es lo más parecido a volar sobre el asfalto, y es evidente: la cuesta que, quizá, subes a 5 km/h la ascenderás a más de 15km/h en tu eléctrica.

E-bikes.
E-bikes.

3. Quien busca ahorrar dinero.

Si las bicicletas eléctricas tienen un futuro brillante por delante es, ante todo, porque son una alternativa perfecta al vehículo motorizado. Y aunque no son pocos los que creen que para hacerse con una hay que realizar un importante desembolso económico, la realidad es que no se tarda en rentabilidad la inversión. Echa cuentas: ¿cuánto se gasta un ciudadano medio al año en transporte público o en gasolina? Por muy cara que pueda parecer a priori, la bicicleta eléctrica siempre será mucho más barata a medio y largo plazo.

¿Quieres probar una bici eléctrica?

4. Quien ya tiene una edad.

Es posible que a día de hoy seas un vital y aguerrido joven, pero tenemos algo que contarte en lo que quizás no hayas reparado: llegará un día en que no será así. El tiempo pasa de manera inexorable para todos, y la vejez a menudo trae consigo esos pequeños achaques que pueden llegar a ser incompatibles con usar la bicicleta todo lo que te gustaría.

5. Quien tiene algún problema de salud. No necesariamente los problemas de salud vienen con la vejez. El asma, o cualquier otro problema respiratorio, así como algún dolor muscular puntual o crónico pueden ser un impedimento a la hora de pedalear. Una bicicleta eléctrica te allanará el camino.

6. Quien no quiere sudar más de la cuenta.

Sí: a todos nos encanta pegarnos una buena sudada de vez en cuando. Sienta muy bien, de hecho. Pero los que pensamos que la bicicleta es, además de un deporte fabuloso, un medio de transporte ideal para el día a día en la jungla urbana, sabemos que hay destinos a los que no quieres llegar empapado como si acabaras de subir el Tourmalet. Como por ejemplo, el trabajo. O una cita, o una cena con amigos, o una visita a casa de tus padres…

7. Quien vive en una ciudad llena de cuestas.

Desgraciada o afortunadamente, no todas las ciudades de España son llanas como las de los Países Bajos. Hay quien encuentra en ello una ventaja (todo lo que sube baja, y a menudo esos desniveles suponen un reto de lo más divertido), pero de nuevo es importante reivindicar a los ciclistas que quieren disfrutar del placer de pedalear sin que eso les suponga un esfuerzo inasumible. Queremos que sean más y más los ciudadanos de toda condición que se suban a la bici.

Una e-bike es infinitamente menos contaminante que un coche o una moto, y mucho más práctica en la ciudad

8. Quien se preocupa por el medio ambiente.

Una bicicleta eléctrica es infinitamente menos contaminante que un coche o una moto. Y ahí están los datos que lo corroboran: La “huella” de una eléctrica es 16 veces inferior a la de un coche convencional, y 6 veces menor al de una moto de baja cilindrada. Según estudios publicados por Ecoinvent, una e-bike genera unos 300 kg de CO2 durante todo su ciclo de vida, recorriendo una media de veinte mil kilómetros.

9. Quien necesita llevar mucho peso.

Tanto si eres de los que acostumbra a llevar una mochila con todo lo que puede hacer falta a lo largo del día (el ordenador, el táper con la comida, prendas de abrigo…) como si lo que quieres es llevar a los niños o utilizar la bicicleta para ir a hacer la compra, una bicicleta eléctrica te cambiará la vida. Nunca llevar todo el peso del mundo fue tan fácil.

10. Quien que no quiere complicarse la vida.

¿Seguro? ¿Permiso de circulación? ¿Impuesto de vehículos de tracción mecánica? Olvídate de todo ese tipo de trámites que te exige la ley para conducir un coche o una moto. Para llevar una bicicleta eléctrica necesitarás lo mismo que para tener una bicicleta convencional: absolutamente nada, más allá de las ganas de disfrutar.

11. Quien ame las bicicletas.

Tanto si es convencional como si es una eléctrica, la bicicleta te da libertad, diversión, eficiencia, conocimiento del entorno, proximidad con el resto de los ciudadanos… y un sinfín de ventajas que te invitamos a descubrir por ti mismo.

¿Quieres probar una bici eléctrica?