Cultura ciclista

Marcia Luz (Specialized): “Las mujeres ciclistas somos distintas, y cada una de nosotras se siente única”

Hace unas semanas, Specialized presentó en Madrid su gama de productos para 2017. Pero también desveló algo más: la marca está desarrollando el Programa Ibérico de Mujeres, con el que quiere captar más mujeres ciclistas mejorando sus productos y atención a este sector creciente. Marcia Luz, responsable del producto de mujer de Specialized, nos cuenta más sobre el tema.

¿Cuándo, y por qué, decide Specialized lanzar una gama sólo para mujeres ciclistas?

Hace mucho tiempo que tenemos productos para mujer, pero al existir cada vez más ciclistas femeninas creímos que era muy importante desarrollar un departamento sólo para ellas y así poder centrarnos mejor en cuanto a productos o eventos. Es un mercado muy importante, que exige dedicación.

¿En qué se diferencia una mujer ciclista de un hombre?

Cuando hacemos un deporte nos apasiona, y somos capaces de entrenar y dedicarnos a él todavía con más intensidad. Además, buscamos cosas diferentes, nos gustan los detalles y personalizar nuestras compras. Y, por supuesto, es importante sentirnos a gusto en una tienda: ver que casi siempre los dependientes son chicos, que hay menos productos para nosotras, nos incomoda. Por eso también queremos que más mujeres estén trabajando en las tiendas, para así sentirnos más seguras y mejor atendidas.

¿Por qué un programa específico para mujeres?

Porque somos distintas. Porque las mujeres tenemos una forma de pensar distinta: nos gustan más los detalles, nos fijamos en otras cosas y porque cada una de nosotras es única.

“Las ciclistas experimentadas buscan los cuadros y tecnología de las bicis masculinas”

¿Cómo prevé Specialized aumentar las ventas entre el público femenino?

Con un marketing más enfocado a ellas, mejorando nuestros productos… Y luego, por supuesto, dependerá de los gustos del público. Para una chica que empieza, es interesante una bicicleta específica, con determinados puntos específicos y con una geometría distinta a la de los chicos. En cambio, para alguien con más bagaje, con un nivel de exigencia mayor, hemos decidido mantener los cuadros de hombre y la tecnología y simplemente cambiar los puntos de contacto.

¿Qué porcentaje de clientela femenina tiene, ahora mismo, Specialized?

No es muy alto, aproximadamente un 5%. En bicicletas de ciudad es mayor, pero en otras categorías sigue siendo más ocasional. Lo bueno es que está cambiando: las mujeres suelen empezar a usar la bicicleta urbana y de montaña, y luego saltan a otras disciplinas como la carretera.

¿Desarrollarán también una gama de complementos y accesorios?

Tenemos ya algunos, pero queremos traer cada vez más a Europa porque la demanda está creciendo. Para hombres hay una gama muy completa, con todo tipo de opciones y precios, y para mujer deberíamos tener lo mismo.

¿Es diferente la demanda según los países?

Sí: cada zona tiene su propia manera de vivir y estar, y también su carácter ciclista. Incluso dentro de un país es distinto, en Madrid hay muchas chicas que salen a montar en ruta mientras en Barcelona hay más ciclistas de montaña.

¿Qué os piden las ciclistas?

Además de bicicletas, cosas concretas… Por ejemplo, les gusta la ropa más colorida que a los chicos, y a la vez más conjuntada: que el maillot, por ejemplo, sea del mismo color que el casco. También características distintas relacionadas con el cuerpo, como culottes con almohadillas distingas o maillots más estrechos.

¿Qué puede contarme del programa de embajadoras de Specialized?

Estamos creando, ahora mismo, la base. Queremos que cada tienda tenga a una chica, a un modelo, que pueda atraer más chicas, que organice eventos y ayude al comercio a atender mejor al público femenino. Desde Specialized no podemos apoyar a cada ciclista, pero queremos que sí haya un vínculo directo entre ellas y nuestras tiendas, para que canalizándolo a través de esa vía podamos apoyarlas con todo lo que necesiten: ropa, bicicletas…

¿Habrá, en el futuro, muchas más ciclistas?

Sí, sin duda. Hace poco tiempo los padres no montaban en bicicleta, por lo que sus hijas tampoco. Pero ahora quieren acompañarles, ven a sus madres, empiezan con mayor naturalidad. Y no te hablo sólo de paseos, sino también de actividades deportivas en carretera y montaña, y la creció de muchos clubes y escuelas de ciclismo en los que cada vez hay más niñas.