ConBici

La DGT propone crear un carnet para los ciclistas

Su directora, María Seguí, también sugiere la puesta en marcha de cursos para combatir la “deficitaria” educación vial de los ciclistas en España.

La directora de la Dirección General de Tráfico, María Seguí, ha despertado la indignación entre el colectivo ciclista. Seguí ha propuesto la creación de un carnet para las personas que circulen en bicicleta, que estaría complementado con la posibilidad de poner en marcha de cursos de capacitación para combatir la “deficitaria” educación vial de los ciclistas. Todo, con el objetivo de reducir la siniestralidad en nuestras calles y carreteras.

La propuesta ha levantado una oleada de críticas por parte de asociaciones y ciclistas de toda España. Desde los que consideran que se trataría de una medida puramente recaudatoria hasta los que recuerdan que el hipotético carnet no existe en ningún país de Europa, donde en líneas generales se están adoptando medidas que van precisamente en la dirección contraria: proteger al ciclista y reducir progresivamente el número de vehículos a motor en nuestras ciudades.

“Algo así terminaría de un plumazo con el sistema de bicicleta pública”

“Es un jarro de agua fría. Un torpedo a la línea de flotación del colectivo ciclista”, explica Mariano Reaño, de la Coordinadora ConBici. “Pero es que además es un disparate y totalmente inviable desde el punto de vista práctico. Si no fuera tan irritante sería para echarse a reír”. Pero risas, pocas. De hecho, la Conbici no piensa quedarse de brazos cruzados. “Estamos buscando apoyo de organizaciones internacionales. Desde la Federacion Europea de Ciclistas no dan crédito. Están absolutamente perplejos”.

La polémica propuesta se suma a otras, como la posible obligatoriedad del casco, que también han levantado duras críticas en los últimos meses. “En países en los que se implantó esa ley, como Australia y Nueva Zelanda, se redujo el número de ciclistas“, recuerda. “Por no hablar que algo así terminaría de un plumazo con el sistema de bicicleta pública”. De hecho, Reaño ve una posible mano negra tras este tipo de medidas: “Creemos que existen presiones de grupos económicos como compañías aseguradoras”, apunta. “Hay gente muy interesada en que la bicicleta no se desarrolle”.