Ciudades

Federación (Argentina): hacia una cultura de movilidad sustentable

Los lectores Valentina Santiago y Tabaré Santiago nos escriben la historia de su ciudad, Federación, y su relación con las bicicletas. Si tú también quieres ser colaborador de Ciclosfera, entra en nuestra sección Embajadores.

La construcción de Federación se inició en el año 1977 como un ejemplo de modernidad y urbanismo a nivel nacional. La relocalización de la mayoría de sus habitantes se efectuó en un área ubicada a cinco kilómetros del antiguo pueblo demolido y luego inundado por las aguas del lago Salto Grande, embalse artificial generado represa de Salto Grande.

La obra de edificación de nuestra ciudad se llevó a cabo a partir de un sistema de construcción de molde. A medida que la empresa constructora iba realizando la parte principal de las viviendas, las dejaba paradas para hacer las terminaciones, y las empresas subcontratadas iban colocando en serie las tejas, pisos, vidrios, mueblería, sanitarios, grifería. La obra de la ciudad llevaría el tiempo de dieciséis meses de construcción ininterrumpida.

Los ciudadanos federaenses fueron trasladados abruptamente

Los ciudadanos federaenses fueron traslados abruptamente a la nueva ciudad, dejando atrás sus pertenencias, inmuebles y sus recuerdos de vida, siendo instalados en un espacio en plena construcción, con calles de barro, mucho concreto a la vista, sin vegetación y con complicaciones en la prestación de los servicios esenciales.

La fundación de la Nueva Federación se produjo el 25 de marzo de 1979, fecha que da nombre a una de las principales avenidas de la ciudad. Durante los años 80, por consecuencias vinculadas a la relocalización forzada, a la ciudad les costó encontrar su horizonte social, su eje económico y asimilar su destino histórico.

La reestructuración total de la ciudad y la creación de nuevos barrios por sorteo y sin posibilidad de opción para sus habitantes, causó la separación de vecinos y familiares que se encontraban vinculados en la vieja ciudad. A este problema se le sumaria la no construcción inicial por parte del gobierno de facto de “lugares de encuentro ciudadano” como plazas, parques, clubes, centros culturales o de reunión.

En los inicios de la década del 90 se iniciaría en Federación la búsqueda de aguas termales. Luego de distintas gestiones y estudios previos, el 24 de noviembre de 1994 se produciría el alumbramiento termal, y en 1997 se inaugura el Primer Parque Termal de la Mesopotamia Argentina. La actividad turística nacida por consecuencia directa de la creación del parque termal trajo nuevamente innumerables modificaciones sociales a la ciudad como así también a su población, economía, crecimiento demográfico y cultura en general.

En la actualidad Federación es también reconocida a nivel nacional por su actividad maderera y citrícola. La industria de la madera y el citrus junto a la actividad turística son las principales fuentes de ingresos para la ciudad.

La ciudad creció demográficamente de manera considerable en los últimos años, hoy cuenta con más de 17.500 habitantes (datos según los datos del Censo 2010). Este crecimiento cambió notablemente la forma de trasladarse de sus habitantes, los cuales dejaron usa la bicicleta y a través de los años optaron por el vehículo a motor: motos autos y camionetas.

Federación en Bici

Desde el grupo Federación en Bici, cuyo objetivo es fomentar el ciclismo urbano, nos propusimos pensar sobre el uso y el no uso de la bicicleta en la ciudad de Federación, e intentar comprender los motivos por los cuales la utilización de la bicicleta ha perdido adeptos en los últimos años, principalmente como “medio de transporte”, pero también en su uso recreativo.

El crecimiento poblacional de nuestra ciudad en la última década trajo como una de sus consecuencias el aumento en el número de vehículos y sobre todo de motocicletas las que se han incrementado notablemente en su número – se estima que solo en el año 2010 se vendieron aproximadamente 500 motos en la ciudad-; cuya expresión más directa son los problemas de tránsito, la contaminación sonora, pero sobre todo la alta tasa de accidentes vinculados al uso de la motocicleta.

Como contrapartida el uso de la bicicleta en la actualidad ha quedado vinculado sobre todo a cuestiones deportivas y recreativas. En la encuesta online 2014/15 realizada por nuestro grupo la pregunta: ¿Qué es lo primero que se le viene a la cabeza al escuchar la palabra bicicleta? el 24,19 % de los encuestados relaciono el uso de la bici con hacer ejercicio y el 19,35 % con distracción) y, en menor escala, como medio de transporte para recorrer distancias cortas o medias (ir al trabajo, a la escuela, hacer trámites, etc).

Como grupo que promueve el ciclismo urbano, estamos convencidos de los múltiples beneficios, algunos conocidos por todos y otros no tanto, que implica el uso de la bicicleta: es económica, ecológica, silenciosa, mejora tu salud, etc. y desde allí surgen los interrogantes: ¿Por qué en la actualidad el uso de la bicicleta ha sido desplazado por el auto y/o moto? ¿Cómo hacer para incentivar su uso? ¿Por qué los jóvenes prefieren circular en motocicleta?

Actualmente en las grandes ciudades y capitales del mundo se está produciendo un fenómeno contrario al que ocurre en nuestra ciudad, podríamos decir que existe una valoración positiva hacia el uso de la bicicleta. Numerosas campañas de fomento han contribuido a ello, y hoy en día una buena cantidad de la población utiliza la bicicleta como medio de transporte, pese a las complicaciones que implica circular por una gran ciudad. Nuestra ciudad de Federación en cambio es una ciudad con muchas posibilidades y puntos a favor para circular en bici.

Entonces para comenzar debemos visualizar ciertos aspectos vinculados a su uso, como por ejemplo la infraestructura, si es adecuada o escasa (ciclovias, estacionamientos, etc), nociones sobre educación vial, (responsabilidades de los ciclistas y de los automovilistas), ausencia de información sobre los beneficios del uso de la bicicleta… Todas son cuestiones a mejorar o a resolver, pero de relativamente fácil aplicación.

Ahora bien, existe un aspecto mucho más complejo, que va más allá de la relación costo/beneficio y de la implementación de infraestructura, y si se quiere de ciertos aspectos negativos del uso de la bici (factores climáticos, por ejemplo). Se trata de la percepción del usuario o no usuario sobre la utilización de la bicicleta.

Pensando el uso de la bicicleta desde una perspectiva antropológica, debemos considerar la misma como una práctica cargada de representaciones y valores, es decir que es necesario indagar sobre ciertos aspectos socioculturales vinculados a dicha práctica. ¿Quiénes son aquellos que usan la bicicleta?, ¿Cuáles son sus motivaciones?, ¿En qué circunstancias acuden a ella?, etc.

Por otro lado, pensando en los no usuarios de la bici y dejando de lado aspectos materiales, y siguiendo la línea del uso de la bici como practica cultural, debemos plantearnos si existe una visión negativa del uso de la bicicleta relacionada a factores económicos, es decir una estigmatización de los usuarios vinculándolos con factores económicos, entendiendo que en la actualidad el automóvil y la motocicleta en menor medida son considerados símbolos de status social.

Como grupo que promueve el ciclismo urbano entonces es importante entender que la infraestructura es un aspecto importante pero no suficiente. Dejamos planteadas estas cuestiones para pensar el uso de la bici como medio de transporte alternativo.

Valentina Santiago. Lic. Antropología por la Universidad Nacional de La Plata.

Tabaré Santiago, abogado, Universidad Nacional del Litoral, Santa Fe.