Se llama Elia García, es actriz y cuentacuentos, tiene 39 años y, el 5 de junio de 2013, tuvo muy mala y muy buena suerte. ¿La buena suerte? Que sufrió un accidente ciclista del que salió, casi, ilesa. ¿La mala? Que, además de ser atropellada por detrás sin cometer ninguna infracción, se vio involucrada en una historia kafkiana en la que le hacen responsable de lo sucedido y reclaman más de 500 euros.
“No es por el dinero, sino porque se haga justicia y, por supuesto, porque tengo muchos amigos ciclistas a los que no quiero que les pase nada igual”. Lo cuenta Elia por teléfono, y también rememora su historia. “Era el 5 de junio de 2013, a las siete y media de la tarde. Circulo de forma reglamentaria con mi bici por el carril derecho de la Avenida de Asturias, Madrid, en dirección a Plaza de Castilla. He quedado con un amigo en el centro, y llevo casco y chaleco reflectante”.
Un día normal… Hasta que algo se tuerce. “De repente”, cuenta Elia, “siento un fuerte impacto por detrás en un tramo recto y cuesta arriba. Vuelo por los aires durante lo que me pareció una eternidad… Un Seat Ibiza me había arrollado. No oí un pitido, ni un frenazo, ni nada que me hiciera sospechar el accidente. Durante unos instantes volé por el cielo preguntándome qué había pasado y dónde iba a caer. Finalmente caigo al suelo aturdida y dolorida, me siento, compruebo que muevo las piernas y enseguida acuden unas decenas de personas que me dicen que no me mueva. Al rato, llegan unos policías de una comisaría cercana, poco después una ambulancia. Me ponen collarín y me llevan al hospital”.
Elia tiene suerte: cae sobre el trasero, tiene contusiones y politraumatismos, pasa toda la noche en observación en el Hospital de La Paz y, finalmente, le dan el alta. Durante las semanas siguientes no puede realizar actividades cotidianas como trabajar, vestirse o asearse, y empieza a extrañarse: ni la conductora del vehículo que la ha atropellado ni ninguna aseguradora la llaman para hacerse cargo de los daños y los gastos: una bicicleta destrozada, ropa rota, casco “tocado”… Poco más de 800 euros.
Falta de escrúpulos
¿La conductora? Esa es otra historia. “Era una chica algo mayor que yo”, cuenta Elia. “Del montón. Tras el accidente, estaba más asustada que yo, incluso tuve que tranquilizarla. Vino conmigo en la ambulancia y me preguntó si la iba a denunciar. En el juicio… Dio una clase magistral de cinismo y falta de escrúpulos”, cuenta Elia.
Juzgados de Plaza Castilla, unos meses después. En el juicio, la conductora (que conducía el coche de una amiga) asegura que “la bici ha atropellado al coche”. La conductora dice que la bicicleta de Elia ha invadido de repente su carril, chocando contra su vehículo “que no iba a más de 30 kilómetros por hora”. La conductora sale absuelta por falta de pruebas. “Creo que la jueza dictó sentencia en un momento, sin complicarse la vida”, dice Elia. “El informe de la policía, que yo pensaba explicaría lo sucedido, estaba lleno de contradicciones y no decía nada claro. No tenía teléfonos de testigos. Recurrí pero reafirmaron la sentencia”.
Pero la historia ya casi se convierte en cómica cuando, unos meses después, en junio de este año, Elia recibe una carta de la aseguradora MMT (Mutua Madrileña del Taxi) reclamando más de 500 euros por los daños del coche en el parachoques delantero. “Lo del dinero no me hizo ninguna gracia”, explica la ciclista, “pero sobre todo me indigna que estas cosas pasen, que esa sea su forma de actuar. Me han contado más casos, y siempre pasa lo mismo… Yo pequé de inexperta y bienintencionada, pero quiero que otros sepan cómo actuar”.
Qué hacer tras un accidente
Elia lo tiene claro: “Lo primero, lleva casco. Cuando tuve el accidente ni me di cuenta de haberme golpeado en la cabeza, pero después vi que el casco tenía un buen rasguño. Y después, si estás consciente, actúa. Haz fotos de todo lo sucedido, de todo lo que se te ocurra. Si hay testigos contrasta con ellos lo sucedido y pídeles el nombre y el teléfono. No te fíes de que otros, como la policía, vayan a hacer bien su trabajo. Perita los daños, que quede todo muy claro. Busca un abogado especializado en este tipo de accidentes, porque hay muchos resquicios y circunstancias que hay que conocer en profundidad. Y prepárate, porque hay gente dispuesta a cualquier cosa”.
Desde entonces, Elia no ha vuelto a montar en bicicleta por Madrid. Hizo una ruta en Semana Santa, pero no circula por ciudad, porque “o voy por la acera, que no es la solución, o voy con mucho miedo”. Elia ha puesto una denuncia en Change.org para que la MMT retire la denuncia. ¿La apoyamos?
8 Comentarios
Cristian
Indignante, al final vamos a tener que hacer como en Rusia e ir a todas partes grabando con una cámara de vídeo por si necesitamos pruebas. Asquerosa la actitud de la conductora.
Diego
Yo gané el recurso a Maphre con Mussap
TERMINATOR
A ESAS PERSONAS ,,,SI NO TE MATAN EN EL ACCIDENTE Y TE LLEGAAS A PARAR TE VAS ENCIMA DEL CONDUCTOR O CONDUCTORA Y LE DAS UNA PALIZA,,, Y LO DEMANDAS LUEGO LUEGO,,,ASI COMO SON CABRONES Y NO LES IMPORTA LA VIDA DEL SER HUMANO ATLETA DESPROTEGIDO,,NO NOS DEBE DE IMPORTAR LA VIDA DE LOS IDIOTAS CONDUCTORES O CONDUCTORAS Y SER CABRON TAMBIEN,,,POR Q LAS LEYES SON UNA MIERDA IGUAL Q EL SISTEMA,,,,
joe
Hola,
en un juicio, lamentablemente, es tu palabra contra la suya y más cuando el ciclista va desamparado pues no tiene seguro. Lo mejor en estos casos llevar un testigo, intentar en el momento del accidente quedarse con el teléfono de alguien.
Saludos
Alvaro
Fui víctima también de un conductor despistado, acá en colombia, bogota. El se paso un pare (señal de detenerse) y me arroyó. Igual sali bien librado del incidente, el hombre me dio lo de los guantes que rompí en la caida, y cuando mire, el móvil estaba roto. Acordamos que yo averiguaría el arreglo y nos veríamos luego….hasta el sol de hoy….no respondió y ya no contesta. No pequemos por ser “buenas personas”. Lo que no se arregle en ese momento, ya después no hay vuelta de hoja. Éxitos ciclosferos!!
Petra
Ay lo siento. 🙁
Igor
Respecto de los abogados, el seguro de hogar suele tener Asistencia Jurídica incluida, y puede valer para que reclamen por ti los daños. Yo tuve un accidente hace un año y tras el mismo, llamé al seguro de hogar y se encargaron de asignarme un abogado que reclamó los daños en mi nombre.
Tuve suerte de que la parte contraria asumió su culpa y su seguro no puso pegas, porque no había testigos del accidente y en su momento no llamamos a la policía para que hiciera atestado. Es más, fue el mismo hombre que me arrolló el que me llevó hasta urgencias en su coche con una fractura bastante fea en mi muñeca que tuvo que ser operada.
Al final, la mayoría de accidentes estás a merced de la buena voluntad de la otra parte.
David
Yo, por suerte, aún no he sufrido ningún accidente con mi bici en mi ciudad. Lo que más me ha llegado a pasar es tener que subirme a la acera para que un imbécil con su bmw me pasará a toda velocidad por una cuesta de un solo carril y muy estrechita y evitar así que me atropellara. Yo levanté la mano en señal de queja cuando pasó por mi lado y el chaval paró su coche, se bajó y vino derecho a pegarme, lo tuvo que parar su mujer que le acompañaba en el coche. Estuve a punto de llamar a la polícia pero no lo hice por evitarme follones. Pero te asusta pensar que energúmenos así circulen por las calles de tu ciudad.
¡Un saludo ciclosferos!