Triciclos

ELF: el triciclo eléctrico y solar que entusiasma en EE UU

Barato, ecológico y original: así es el ELF (Electric, Light and Fun), un triciclo eléctrico y recargable con el sol que ha sido noticia en los principales medios estadounidenses.

Movido por ti… y por el sol. Así es ELF, un vehículo alimentado por pedaladas y energía solar idóneo, según sus propios fabricantes, para ir a trabajar, labores de mensajería y cualquier otro envío que no exija grandes distancias.

ELF fue creado por Organic Transit, empresa que se propuso crear “el vehículo más eficiente del mundo”. Para conseguirlo desarrollaron un triciclo que permite circular con total normalidad por la calzada, pero también por sendas ciclistas o parques, y que al ser legalmente una bicicleta no requiere ni carné de conducir, ni seguro ni permiso de circulación.

Alimentándose sólo a base de energía eléctrica ELF puede alcanzar los 32 km/h, que llegan a los 48 km/h si los complementamos con nuestras pedaladas. Además de transportar a un pasajero, al vehículo puede llevar unos 80 kilos de equipaje adicionales (la carga máxima es de 158 kilos).

Uniendo las ventajas de un coche y una bicicleta, el proyecto gustó en Kickstarter, donde reunió 225.000 dólares de los 100.000 que necesitaba para ponerse en funcionamiento. Eso ha permitido su fabricación y lanzamiento, con un precio en EE UU que parte de los 5.495 dólares (4.167 euros).

El modelo básico cuesta poco más de 4000 euros y cuenta con tres marchas, panel solar y frenos de disco

El modelo básico cuenta con un asiento ergonómico, suspensión delantera, chasis de aluminio (un 40% reciclado), ruedas (de bicicleta) Continental, cambio de tres marchas, batería de litio NMC de Samsung (promete una autonomía mínima de 24 kilómetros y más de 2000 ciclos de carga) y un motor eléctrico de 600W.

Pero, además, ELF tiene en el techo un panel solar de 100W, que posibilita que hablemos de un vehículo respetuoso con el medioambiente: en vez de recargar la batería a través de la corriente eléctrica (algo que se hace en dos horas), basta con los rayos del sol (siete horas cargarían completamente la batería) y la energía generada por nuestras piernas para desplazarnos de un sitio a otro.

La carrocería está fabricada con un plástico reciclable, que por unos 100 euros adicionales puede ir pintada de colores simples (rojo, verde o mango) o bicolor. La lista de opciones es larga, y muy atractiva: batería adicional o panel solar supletorio para aumentar la autonomía, neumáticos más grandes, cambio de 8 velocidades, frenos más potentes (los de serie ya son de disco)…

La serie inicial constaba de 360 unidades, y en la actualidad se están fabricando 10 más cada semana. Ya es posible verlos rodando en distintas ciudades estadounidenses, y la tienda de su fabricante ofrece la posibilidad de enviarlo también a Canadá y Finlandia. Pero, sobre todo, ELF ha llamado la atención de los grandes medios norteamericanos, que le han dedicado innumerables artículos… ¿Triunfará en esos países, y se convertirá en un fenómeno global?