En el Ciclotimia de nuestro último número debatíamos sobre los controles de alcoholemia a los ciclistas, que se han vuelto habituales en ciudades como Madrid y Barcelona y pueden acarrear multas de entre 500 y 1.000 euros. Como siempre, una opinión a favor y otra en contra. ¿Tú qué opinas?
A FAVOR
Si queremos que se nos considere conductores de un vehículo, con todos los derechos que eso conlleva, no podemos obviar nuestras obligaciones. Cada fin de semana vemos a muchos jóvenes -y no tan jóvenes- regresar a casa haciendo eses sobre una bicicleta, convencidos de estar exentos de rendir cuentas por el peligro público que supone su estado de embriaguez. Esa impunidad empieza a ser cosa del pasado, a imagen y semejanza de lo que ocurre en otros países europeos donde los controles de alcoholemia a ciclistas llevan años formando parte de la rutina policial. Los ciclistas responsables no podemos sino alegrarnos por ello: es señal inequívoca de que empezamos a formar parte importante del tráfico. Pedaleemos, pero cumpliendo las normas. Por el bien de todos.
EN CONTRA
Matar moscas a cañonazos. O, simplemente, pagar justos por pecadores. ¿Cuántos accidentes provocan los ciclistas urbanos con una copa de más? Una cifra ínfima, inexistente, y más comparada con el peligro y los dramas que producen los automovilistas borrachos. La lógica lo demuestra: si uno está ebrio es incapaz de pedalear. Y luego están, claro, la justicia y la coherencia: ¿por qué no hacer lo mismo con un peatón que, borracho, puede cruzar por donde no debe o saltarse un semáforo en rojo? O, sobre todo, ¿por qué no hacer controles de verdad, en los lugares que todos sabemos, a los miles de conductores que circulan borrachos y en cuyas manos, ahí sí, hay una auténtica máquina de matar de dos toneladas de peso?
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- “Madrid aumenta los controles de alcoholemia a los ciclistas”: lee la noticia de hace unas semanas.
3 Comentarios
Cristian
En contra, como decís, es matar moscas a cañonazos y lo que es más importante, es desviar recursos para un problema menor, el tiempo que los policías estarán dedicando a controlar a ciclistas es tiempo que no dedican a controlar los verdaderos peligros, conductores al volante, el peligro que significa un ciclista bebido es muchísimo menor que el de un conductor bebido.
Juan Carlos
En mi caso estoy a favor. Me.da igual sea conductor de coche, de motocicleta, de ciclomotor o de bicicleta.
Por cierto que a los peatones también se les hacen controles de alcoholemia. En caso de implicado en un accidente es obligatorio.
Otra cosa es que se no se hagan por las autoridades, igual que cuando un policía dice q es compañero y tampoco se lo hacen.
La no aplicación es responsabilidad de quuen no aplica la norma con igualdad para todos.
Carlos O
Miren, ni a favor ni en contra.
A favor de que se multe, sí. A favor de que la multa sea proporcional al peligro que se genera, que sea una multa justa, pues por supuesto!
La bicicleta no es como cualquier vehículo y es algo que deberían meterse en la cabeza muchos.
La bicicleta pesa 14 kg y alcanza velocidades de 30 km/h. Un coche pesa más de 1000 kg y alcanza velocidades de 50 km/h, 80k m/h… por la ciudad. ¿Alguna vez habéis oído que una bicicleta sin control se suba a una acera, arrolle a las personas que están tomando algo en una cafetería y mate a cinco? ¿Habéis escuchado alguna vez que un ciclista muy borracho haya arrastrado a un peatón cincuenta metros, lo haya matado y haya continuado su marcha sin darse cuenta de lo sucedido? En Valencia una motocicleta arrasó una terraza dejando un muerto y varios heridos. Ha matado algún ciclista a algún peatón. Por supuesto, pero mirad los números. El peligro en la ciudad es el tráfico a motor por su peso y velocidad.
Con esto quiero decir que hay diferencias más que notables entre la peligrosidad de los vehículos motorizados y las bicicletas. No es lo mismo sentarse borracho al volante que subirse borracho a una bicicleta. Sí, son vehículos, pero son muy distintos. Ya basta de usar este argumento falaz. La bicicleta no es como cualquier otro vehículo. No es como una moto, no es como un coche, no es como una furgoneta, no es como un autobús…
¿Multar? Que multen, y que la multa sea proporcional al daño que puede causar un vehículo muy ligero que no alcanza grandes velocidades. Ahora bien, si los Ayuntamientos tienen que destinar sus recursos de forma eficiente, yo tendría claras mis prioridades.
saludos!