Bicicletas

Bikoff: una bicicleta plegable… ¿o un maletín?

El proyecto fue mostrado en 2010, pero sigue estando más que vigente: hablamos de Bikoff, una original bicicleta plegable pensada para los trabajadores de las grandes ciudades.

Al banco. A la oficina. A una reunión. Y a casa. Así, de un punto a otro de la ciudad, transcurre el día a día de millones de personas en el mundo, muchas de las cuales siguen apostando por el coche para hacer ese tipo de recorridos. ¿El resultado? Contaminación, ciudades invivibles y, desde luego, personas infelices y menos eficaces.

¿Por qué no ir en bicicleta a la oficina? Eso mismo se preguntaba el diseñador argentino Marcos Madia, que en 2010 presentó su proyecto Bikoff. “Nace para convencer a la gente de que deje sus coches y vaya en bicicleta cada mañana a la oficina”, aseguraba.

¿Cómo? Subidos en esta pequeña bicicleta plegable, que incorpora un maletín como parte del cuadro. Según su creador, “hay una íntima relación entre el maletín y el cuadro. El maletín completa el cuadro, dándole una estructura mayor. Ambos están fabricados en fibra de carbono, proporcionando un peso mínimo y una resistencia máxima”.

El diseño llama la atención tanto por su sencillez como por su atractivo, y no parece en absoluto descabellado. Sin el maletín, la bicicleta queda plegada ocupando muy poco espacio y, en principio, con un peso muy bajo y mucha portabilidad. Con el maletín, vemos una bicicleta plegable sencilla, cómoda y muy pequeña, idónea para desplazarse en las aglomeraciones urbanas.

Pensada para aquellos que quieren pedalear y usar bicicleta pero no mancharse, la Bikoff no incorpora cadena. Además, tiene todo el cableado interior.