Cultura ciclista

“Sorprende que muchos biciactivistas españoles sean tan mayores cuando en América tienen 20 ó 30 años”

Andrea María Navarrete, creadora de Mujeres Bici-bles y referencia imprescindible para entender el ciclismo urbano y a los biciactivistas en Latinoamérica, sigue en España. Navarrete impartirá talleres sobre ciclismo y mujer hasta mediados de julio, y hoy mismo se celebra uno en Gijón. Charlamos sobre su experiencia en España y cómo ve la escena ciclista local.

Llegaste a España a finales de abril para asistir a La Ciudad de las Bicis. ¿Por dónde has estado después?

El viaje empezó en Zaragoza, efectivamente, y después he pasado por Sevilla, el Puerto de Santa Maria, Granada, Murcia, Cartagena, Barcelona, Alicante, Toledo, Albacete, A Coruña, Santiago de Compostela y, ahora mismo, estoy en Gijón. Seguro que me dejo algún sitio… ¡No he parado!

¿Cómo se organizaban los viajes?

Me he movido en la medida en que la gente me ha ayudado a moverme. Iba sin un presupuesto, así que me desplazaba donde los colectivos me reclamaban y pagaban el viaje, además de permitirme dormir y comer. Ahora, por ejemplo, estoy en Gijón, pero mañana iré a Oviedo porque un colectivo de allí me ha pagado los billetes y me quedaré en casa de alguien. Es una red ciclista, pero también solidaria. En cierta forma, es como andar viajando en bicicleta.

“Mi viaje se sostiene por la ayuda de la gente y los colectivos. Es una red ciclista, pero también solidaria”

¿Hasta qué punto tenías previsto el recorrido?

No había nada previsto, más que el billete de ida y el de vuelta, que será el 21 de julio. Sabía que, pasara lo que pasara, estaría estos dos meses y tres semanas en España y después volvería a Colombia. Carlos Rodríguez, de 30 días en bici, me ayudó a contactar con mucha gente, y yo tenía dos talleres organizados para presentar, el de “Anacronía, diacronía y sincronía de las mujeres en bicicleta” y el de “Confrontando el sexismo en espacios ciclistas”, que he podido compartir en casi 20 ciudades.

También venías con Mujeres Bici-bles, el colectivo para sumar mujeres a la causa ciclista.

En algunas ciudades como Murcia, Valencia, Alicante, Albacete, Villamalea, Granada, Coruña o Gijón, donde tendremos una reunión al respecto, hay chicas interesadas en sumarse y tener una representación de Mujeres Bici-bles. Lo ideal es que existan grupos de mujeres ciclistas, independientemente del nombre que les pongas.

¿Cómo te ha recibido la gente en España?

Creo que, sobre todo en las grandes ciudades, cuesta organizar algo, aunque no ha sido imposible. En Barcelona, por ejemplo, apenas pude encontrar espacios o grupos de encuentro. En Latinoamérica hay algo más de calma, de tranquilidad, no hay tanto movimiento. En todo caso, he recorrido 20 ciudades españolas y en casi todas la experiencia ha sido maravillosa. Veremos las que quedan, que son lugares como León, Palencia, Valladolid y Madrid.

¿Cuál era tu propósito cuando decidiste venir?

Hacer los dos talleres, estar en al menos diez ciudades, compartir postales de mi viaje en bici por Sudamérica y conseguir algo de dinero. Al final, la verdad, el dinero me importa muy poco, y he conseguido sobrepasar mis expectativas visitando, ya, más de 20 lugares. Lo más complicado, eso sí, ha sido el tema económico. España me ha parecido tremendamente cara: ¡el dinero que pensaba gastar en tres meses lo gastas en apenas tres días!

“Sevilla tiene mucha infraestructura ciclista, pero está llena de coches. Eso me ha hecho reflexionar”

Imagino que habrás pedaleado mucho.

Sí, en todas las ciudades en las que he estado. Creo que uno de los lugares que más me llamaron la atención, y más me han hecho reflexionar, es Sevilla. Hay una red de carriles bici muy amplia, aparcamientos, un sistema de bici pública y, sin embargo, está llena de coches. Toda la ciudad está llena de coches. Eso me ha hecho replantearme hasta qué punto crear infraestructura ciclista implica, realmente, que haya después más ciclistas urbanos, o si realmente todo pasa por restringir y desincentivar el uso del coche.

Andrea María Navarrete.
Andrea María Navarrete.

¿Alguna decepción?

A Coruña o Gijón, que son preciosas, apenas tienen infraestructura ciclista y es sólo para pasear junto a la playa, demasiado recreacional. Y es una pena lo que pasa en Santiago de Compostela: un lugar que recibe tantísima gente de todos lados, con tantos turistas, pero donde no hay apenas ciclistas urbanos ni facilidades. Hay ciclistas con sus alforjas, gente que hace el camino, pero no es un lugar donde se fomenta la bicicleta. Hay un grupo local llamado Composcleta que está trabajando muy duro para cambiar las cosas, pero no vi que el gobierno les apoyara demasiado. También me llamó la atención, en lugares como Santiago, Sevilla o Toledo, que dejen entrar coches en el casco histórico. Con turismo, con adoquines, con tanta belleza… ¡No caben! Y, sin embargo, ¡está lleno de coches y autobuses!

Uno de mis lugares favoritos para pedalear es Barcelona. ¿Qué te pareció?

Habrá cosas que no funcionan, por supuesto, pero me encantó. Me moví casi constantemente por carriles bicis, y es uno de los pocos lugares donde tienes la sensación de que, realmente, la infraestructura ciclista conecta la ciudad. Eso sí, noté que algunos carriles son muy estrechos, incluso bidireccionales, y tienes la sensación de que te vas a chocar. Además, claro, de que como toda España hay demasiados coches. Pero es una ciudad maravillosa.

Has hablado con muchos colectivos ciclistas españoles. ¿Qué impresión te han dado?

Me ha sorprendido que la mayor parte de la gente es mayor. En Latinoamérica, casi todos los biciactivistas están entre los 20 y los 35 años. En cambio, en España, los grupos están formados por gente con 40, 50 ó 60 años, y algunos tienen nietos. Es algo que me encanta, porque tienen más conocimientos y mucho menos ego: en Colombia o México somos más jóvenes y eso nos lleva a necesitar más reconocimiento más personal. En cuanto a las dinámicas de trabajo, en todos los lados son muy parecidas. Y, en España, también me llama la atención que mucha gente paga por ser parte de un grupo o asociación, lo que les permite hacer determinadas cosas concretas.

“Puede que haya menos activismo en España, pero también se debe a que la bici ya está presente en la discusión política”

¿Hay menos activismo en España que en México o Colombia? ¿Hay, incluso, menos entusiasmo por el ciclismo urbano?

Puede ser… En una ciudad pequeña de Colombia puede haber diez grupos de ciclistas urbanos, mientras que en una ciudad mediana de España hay uno. Pero también siento que se debe a que ya se ha ganado un espacio: la bicicleta está presente en la discusión política y en el radar de la gente que está en los gobiernos, mientras que en la mayor parte de Latinoamérica tenemos que seguir peleando para tener esa presencia en el debate.

¿Es muy diferente pedalear en España siendo mujer?

Yo lo he vivido con calma: en el tiempo que llevo aquí no he tenido ningún problema. Me ha sorprendido que, en algunas ciudades, no se creían lo difícil que es acceder a la bicicleta siendo mujer en, por ejemplo, Colombia. Lo veían como algo muy del pasado, mientras que en otros lugares me decían que en España, en cierta forma, pasa lo mismo. Lo que sigo viendo en todos lados es que falta autonomía ciclista femenina: muy pocas mujeres, por ejemplo, saben de mecánica, y hay muy pocas en los colectivos.

Para combatirlo están, por ejemplo, tus talleres. ¿A cuáles podemos asistir aún?

Hoy hacemos en Gijón el de “Diacronía, sincronía y anacronía de las mujeres en bicicleta”, y el día 8 el de “Confrontando el sexismo en el ciclismo urbano”. En Oviedo, mañana 6 de julio, haremos el “Taller de movilidad ciclista desde la perspectiva de género” . El 10 de julio, en León, será el de “Diacronía…”. Y nos quedan por definir talleres y fechas en Palencia, Valladolid y Madrid. ¡Seguiremos informando!