El pasado 25 de enero se celebró, en Donostia-San Sebastián, la jornada ‘Retos y oportunidades del ciclismo eléctrico para las políticas de movilidad’, organizada por el Departamento de Sostenibilidad de la Diputación Foral de Gipuzkoa y Fundación Cristina Enea. Una interesante y productiva jornada en la que, de la mano de distintos expertos, se analizó el presente y futuro de las bicicletas eléctricas, y en la que Ciclosfera estuvo presente.
Naturklima, el sorprendente edificio situado en las afueras de Donostia-San Sebastián y que presume de ser todo un ejemplo de sostenibilidad, acogió la jornada ‘Retos y oportunidades del ciclismo eléctrico para las políticas de movilidad’, que durante toda una mañana contó con muy distintas voces que analizaron las posibilidad de las bicicletas de pedaleo asistido en el campo de la movilidad.
El Diputado Foral de Sostenibilidad de Gipuzkoa, José Ignacio Asensio, recibió a los asistentes con un mensaje claro: “Hemos asumido la responsabilidad de gestionar las vías ciclistas dentro de la lucha contra el cambio climático”, explicó, “y el ciclismo eléctrico se ha convertido en el vehículo mas vendido y una herramienta perfecta para ampliar la gama de usuarios del ciclismo. Las e-bikes son más accesibles para aquellas personas menos inclinadas a la actividad física intensa y amplían las posibilidades de desplazamiento y carga: prueba de su importancia estratégica es la adopción, en 2023, de la Declaración europea sobre el uso de la bicicleta. La bicicleta es una prioridad para Gipuzkoa, donde el transporte implica más del 40% de las emisiones contaminantes: todo lo que hagamos en este ámbito será poco, y la bicicleta se presenta como una herramienta ecológica y económica, con un papel estratégico en la inclusión de todas las personas para fomentar una movilidad mas justa, universal y equitativa”.
"La bicicleta es una prioridad para Gipuzkoa", aseguró el Diputado Foral de Sostenibilidad José Ignacio Asensio.
El evento también sirvió para presentar el libro Las bicicletas de pedaleo asistido y las políticas locales de movilidad, escrito por Alfonso Sanz y el primero de una futura lista de publicaciones técnicas de la Zikloteka. "Con este nuevo proyecto", explicó Jose Mª Hernández, Director Gerente de Fundación Cristina Enea, responsable junto a la Diputación de la Zikloteka, "queremos poner a disposición pública investigaciones, informes y ensayos relacionados con el ciclismo como medio de desplazamiento. Nuestro objetivo prioritario sigue siendo proporcionar bases de conocimiento y líneas de actuación que resulten de utilidad teórica y práctica para profesionales, instituciones, asociaciones y personas que trabajan en su promoción".
Durante el evento se presentó el libro 'Las bicicletas de pedaleo asistido y las políticas locales de movilidad', primera de una serie de publicaciones técnicas de la Zikloteka
El papel de las e-bikes y las bicis convencionales
El primer participante en la jornada fue Alfonso Sanz, autor del mencionado libro Las bicicletas de pedaleo asistido y las políticas locales de movilidad. “En los últimos años ha habido un crecimiento vertiginoso, que no podíamos ni esperar, de las bicicletas eléctricas”, comenzó su intervención Sanz, “pero ahora queda preguntarse… ¿Qué papel le va a quedar a las bicicletas convencionales en el futuro de la movilidad? ¿Qué hacemos con las bicis convencionales?”
Sanz dio datos de 2022, contando cómo en Países Bajos ya se venden más e-bikes que bicicletas convencionales, un fenómeno que se puede repetir en países como Alemania, Francia o, por supuesto, España. Sanz, cuya intervención giró en torno a su libro, también reflexionó sobre las ventajas y desventajas de las e-bikes. Entre las primeras destacó la posibilidad de afrontar distancias más largas y topografías más desfavorables, la posibilidad de transportar personas o cargas, las facilidades que implican para personas con dificultades físicas o más sedentarias o, centrándonos en Gipuzkoa, cómo pueden suponer un medio de transporte mejor que una bici convencional, ya que permiten llegar a los destinos “más lejos, más rápido y mejor”. En cuanto a las desventajas, Sanz citó el hecho de que al ser un vehículo más pesado y rápido pueden implicar mayor peligrosidad (algo de lo que, dejó bien claro, no hay aún evidencias), un mayor impacto ambiental (especialmente por lo que implica llevar una batería), su mayor coste económico y una mayor dependencia en cuanto a mantenimiento o reparación.
"La bicicleta eléctrica ha llegado para quedarse, pero las políticas municipales deben evitar discriminar a las bicis convencionales" (Alfonso Sanz)
“La bicicleta eléctrica consume muy poco”, concluyó Sanz, “unas ocho veces menos que una moto y unas 24 veces menos que un coche eléctrico”, aseguró. “Hablamos siempre de ampliar el rango de uso de la bicicleta, de hacer crecer, en definitiva, las oportunidades para la bicicleta, y desde mi punto de vista las e-bikes no son un objetivo en sí mismo sino un buen elemento dentro de un plan más completo. Más bicicletas eléctricas no es sinónimo de movilidad más sostenible a menos que sean usadas por gente que se movía en automóvil. Hay que pensar en una promoción general, económica y de formación, en la normativa y en la fiscalidad. La bicicleta de pedaleo asistido ha llegado para quedarse”, concluyó Sanz, "pero las políticas municipales deben evitar la discriminación de las bicis convencionales".
El papel de la industria
Jesús Freire, secretario general de AMBE (Asociación de Marcas y Bicicletas de España), fue el siguiente en participar en la jornada. Freire transmitió la importancia de dicha industria, que reúne a más de 400 empresas, casi 200 fabricantes y más de 3.100 tiendas y talleres, generando unos 25.000 empleos directos en nuestro país. Unas cifras que, a priori, seguirán creciendo: “Según una estimación europea”, explicó Freire, “en España puede llegar a venderse más de dos millones de bicicletas eléctricas en 2030, con nuevos usuarios y nuevas oportunidades”.
Según cifras de la Unión Europea, en España podrían llegar a venderse dos millones de e-bikes en 2030.
Para Freire, hay cuatro claves para conseguir ese impulso y alcanzar cifras tan optimistas: “la construcción de nueva y buena infraestructura, ofrecer incentivos para la compra de bicicletas, añadirle incentivos fiscales para las empresas que fomenten el uso de la bicicleta y la disponibilidad de mejores aparcamientos que permitan también fomentar la intermodalidad”.
Herramienta clave
“Tenemos que pasar de un uso irracional del coche a universalizar la bicicleta”, aseguró Belén Calahorro, de la Oficina Técnica de Conbici, “y las e-bikes son clave para las largas distancias, superar obstáculos naturales, el transporte de mercancías y animar a pedalear a nuevos usuarios”.
Calahorro destacó, por ejemplo, la importancia que puede tener la ciclologística, y cómo debemos cambiar la mirada para considerar la bicicleta, más que como un medio para hacer deporte, como una forma de transporte. “Es una herramienta clave para mitigar el cambio climático”, explicó, “aunque es verdad que también plantea diferentes retos. Para mí, los más importantes conciernen a su peso, que es más elevado que en una bici tradicional, a su autonomía, la seguridad de uso para usuarios no demasiado experimentados, su ubicación en las calles considerando que, por ejemplo, las bicicletas de carga pueden ser voluminosas, o cómo facilitar su aparcamiento”.
Menos ocio, más movilidad
Retos y oportunidades del ciclismo eléctrico: así se titulaba la exposición de Ruth Lamas, coordinadora técnica de la Red de Ciudades por la Bicicleta, que empezó su intervención explicando que “la bici convencional se usa menos que la ebike como medio de transporte: quien tiene una ebike no solo la usa para el ocio, sino que también la emplea mucho para la movilidad”.
Según los datos que manejan en la RCxB las bicicletas eléctricas se usan con más frecuencia y para hacer más kilómetros que las tradicionales. También están muy atentos al auge de las e-bikes dentro del sector de los sistemas de bicicleta compartida: en 2020 solo el 17% de sistemas en España tenían eléctricas, mientras que en 2023 ya son casi el 42%. En concreto, Lamas se detuvo en el caso de Barcelona (el Bicing tiene 4.000 bicis convencionales y 3.000 eléctricas, pero el uso de estas últimas es casi el doble), San Sebastián (con 317 bicicletas de cada tipo, pero donde también el uso de las e-bikes está creciendo mucho más rápido) y Valladolid, donde la ratio de uso de las eléctricas también es muy mayor.
“Las bicicletas con asistencia eléctrica suponen muchas oportunidades: pueden acercar al ciclismo a nuevas personas, diversificar el espectro de uso, romper estereotipos y, en definitiva, contribuir a normalizar el uso de la bicicleta tanto en ciudades como en territorios”, concluyó Lamas.
El debate
En la segunda parte de la jornada se celebró un debate donde todos los ponentes conversaron sobre el “ciclismo eléctrico”. Ruth Lamas añadió un concepto clave: “Debemos acompañar a la ciudadanía en este proceso”, explicó. “Además de políticas públicas como ayudas a la compra, hay que acercar las bicicletas eléctricas a todo tipo de colectivos. Generar espacios donde probar las bicicletas, explicar cómo circular… Pensar, en definitiva, en cómo acompañar y educar a determinados colectivos”.
"Hay que acercar las e-bikes a todo tipo de colectivos, y generar espacios donde probar las bicicletas y explicar cómo circular" (Ruth Lamas, Red de Ciudades por la Bicicleta)
Sanz reflexionó sobre la “sobreactuación” que en determinados ámbitos se produce desde el sector público. “Es algo que se ve claramente con los coches eléctricos, donde se está dopando al sector”, explicó. “Hay que ver a quién se les dan las ayudas, en qué condiciones… Con los coches, por ejemplo, se está ayudando a comprar coches eléctricos muy grandes, muy poco sostenibles y que además están llegando a la población con mayor poder adquisitivo. La administración tiene, por supuesto, que organizar el espacio público, decidir quién tiene prioridad sobre el mismo, pero cuidado con meterse en otros ámbitos.
En una de sus intervenciones, Jesús Freire también puso encima de la mesa otro aspecto vital: el de los patinetes eléctricos. “La convivencia con las bicicletas eléctricas es mucho más sencilla que con los patinetes eléctricos”, aseguró, “que son más inseguros, más abruptos, mientras que una e-bike es mucho más parecida a una bici tradicional”. En todo caso, por supuesto, tenemos que hacer que los caminos ciclistas sean los más cómodos, los más sencillos, en lugar de priorizar a los coches”.
Cierre y conclusiones
El último apartado de la intensa jornada sirvió para que los participantes lanzaran una conclusión sobre todo lo comentado. Alfonso Sanz insistió en que las políticas públicas “no deben ser una Carta a los Reyes Magos, sino que han de tener objetivos de equidad y transformación de los comportamientos. Las ayudas a la electrificación están siendo un desastre con los automóviles, y ahora veremos qué puede pasar con las bicicletas”. Por su parte, Belén Calahorro subrayó el papel de las eléctricas para universalizar el ciclismo, pero siempre considerando “que las bicis convencionales son maravillosas. Lo que buscamos, en definitiva, es que haya más ciclistas, que las bicis se usen más. Y también que la bicicleta sea protagonista en los planes de transformación, de lucha contra el calentamiento global, donde muchas veces no se le da la importancia que merece”.
Pedro Tomás, del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, aseguró que “las bicicletas eléctricas llenarán las calles de ciclistas, y eso permitirá movilizar fondos para hacer actuaciones públicas que se lo pongan aún más fácil. Pero, además, seguiremos subvencionando ayuntamientos e iniciativas que apoyen la movilidad sostenible, e impulsaremos la investigación porque echamos de menos más rigor científico en la toma de decisiones”.
Ciclosfera, en la Zikloteka
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Más sobre las publicaciones de la Zikloteka
Las bicicletas de pedaleo asistido y las políticas locales de movilidad es el primero de una colección en la que desde la Zikloteka se apuesta "por abordar, de manera preferente, un conjunto de temáticas relativas a la movilidad ciclista que, a nuestro entender, no cuentan con el tratamiento y el espacio debido en la bibliografía científico-técnica, tanto en lengua española como en euskera. Nuestra voluntad es, pues, la de contribuir progresivamente a paliar este déficit con el encargo de investigación oportuno y publicando posteriormente sus resultados".