Ciudades

Los que usaron BiciMAD sin pagar, impunes por un vacío legal

La Audiencia Provincial de Madrid ha revocado una veintena de condenas a personas que conducían una de las bicicletas públicas de BiciMAD sin pagar por ellas.

Aprovecharse de un servicio que es de todos los madrileños, y hacerlo sin pagar, sale gratis. Desde su puesta en servicio, y especialmente durante sus primeros meses de existencia, las bicicletas de alquiler de BiciMAD sufrieron un sinfín de actos vandálicos. Decenas de ellas aparecían arrojadas en cualquier lugar tras haber sido arrancadas de las estaciones. Y con ello, llegaron las primeras detenciones.

Ahora, un vacío legal ha permitido que una veintena de condenas por aquellos hechos se hayan saldado sin una multa siquiera. La Audiencia Provincial de Madrid ha absuelto a todas aquellas personas al entender que, al no tener intención de quedarse la bicicleta sino de usarla de manera temporal, esas personas no cometieron un delito de apropiación indebida. Además, debido a que las bicicletas no son consideradas vehículos de motor, no se puede condenar a un acusado de hurto.

Se considera que sólo querían usarla “de manera temporal”, y al no ser consideradas vehículos de motor no es un hurto

Desde el Ayuntamiento de Madrid se ha acatado la sentencia, y sus responsables han declarado que respetan la decisión de los jueces. Sin embargo, el malestar por la impunidad es más que evidente, no sólo en el Consistorio sino también entre los muchos madrileños que sí utilizan correctamente las bicicletas de BiciMAD.

El servicio de alquiler de bicicletas se puso en marcha en junio de 2014, durante la gestión de la exalcaldesa del PP, Ana Botella. En un principio estaba gestionado por la empresa Bonopark, pero el Ayuntamiento de la actual alcaldesa, Manuela Carmena, firmó un contrato de cesión a la Empresa Municipal de Transportes (EMT) por un coste de 10,5 millones de euros, tras acumular Bonopark pérdidas millonarias.